Star Wars: El Despertar de una nueva Generación

Es absurdo adelantarse a criticar el próximo gran estreno del séptimo arte, sobre todo si las expectativas de parte de los fans amantes de la saga galáctica, son tan altas como un rascacielos en Abu Dabi, y la avidez que reside en sus corazones no tiene comparación. Pero sería pertinente darse el permiso de hacer comentarios y predicciones de lo que se espera –a mi opinión- la película más taquillera del año.

Star Wars –prefiero llamarla así- en 1977 fue un hito en aquella época. Marcó esa generación setentera y la de la actualidad, enamorando a una comunidad juvenil que sueña convertirse en un caballero Jedi, o si son fríos de corazón, pasarse al lado oscuro de la fuerza.

Los 6 episodios de la saga le dieron otra perspectiva al género de la ciencia ficción, no solo por la historia innovadora, sino por modo de transcurrir los hechos, el ambiente donde todo se lleva a cabo, y la odisea por un universo libre del imperio de los Sith. Esto se tornó en un fenómeno a escala mundial, pasando de juguetes, ropa, accesorios, hasta los más fans disfrazándose de sus personajes iconos. Revolucionó el cine en pocas palabras.

Ahora bien, a lo que viene el caso: Star Wars El Despertar de la Fuerza. A escasos días de su estreno mundial, los verdaderos cinéfilos viven pensando si el filme será un éxito rotundo, o dejará a todos como condorito. Luego de los que trailers fueran lanzados, la gente quedó fascinada, encantada, sorprendida por lo nuevo que trae la saga espacial. A mi consideración, el nuevo episodio puede posicionarse como el mejor de los 6 anteriores.

¿Por qué doy eso por hecho? Se pensará que el triunfo pudiera recaer en el regreso de Han Solo, la princesa Leia y Chewbacca, pero no solo ellos serán ovacionados. Los nuevos integrantes, al haber visto se desempeño en los emocionantes minutos de los avances, darán al público lo que necesita: buena actuación, heroísmo puro y verdadero, compenetración con los demás colaboradores, y quizá el lanzamiento a la gloria.

Y apartando el performance los nuevos héroes, está el villano principal, que me resulta genial su máscara y el sable de luz (inédito de paso). Pero antes de seguir adelante, hay que esperar si su vileza superará o igualará a la de Darth Vader. De resto, en lo que respecta a escenografía, efectos, fotografía, juegos de cámara, es impensable que deje a todos con un mal sabor si se trata de J.J Abrams, destacado director por su trabajo con Star Trek, la competencia directa de Star Wars.

En cuanto a la esperanza de lograr premios de envergadura internacional, es probable que consiga unos cuantos importantes, y de los premios de la academia, puede que dé la sorpresa (aunque las que fueron nominadas de los Globos de Oro, no juegan carrito).

Deseo con creces que este nuevo episodio se luzca y se venda solo, sin necesidad de mucha publicidad al tratarse la creación del gran George Lucas. El próximo 18 de diciembre será la fecha en que el mundo alabará una vez más la lucha del bien contra el mal.

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