Columna: Lawrence de Venezuela

Globos de Oro: Sorpresivo y Esperado 


Un deseo platónico se hace presente cuando se aprecia por televisión a las grandes personalidades del mundo del cine y la televisión congregándose en los Globos de Oro. A esta cita pudiera llamársele los “pre-oscars”, o como muchos le argumentan: el barómetro para los premios de la Academia. Sin embargo, esto no es garante cien por ciento que los mismos galardonados dispongan de la misma suerte para hacerse acreedores del hombrecito de Oro, pero las probabilidades a llevarse la máxima gloria tienden a ascender.

En esta septuagésima tercera entrega de los Globos, fue sorpresiva y esperada. Candidatos colosales merecedores de un reconocimiento a su ardua labor protagónica, aunque lastimosamente uno es el triunfador (claro, ya ser nominado entre tantas películas es un logro, pero la crítica extranjera es reacia en sus decisiones). Simplemente una noche glamorosa y efervescente de experiencias.

No haré hincapié en todos los premiados, sino en los de mayor de importancia y los que -bajo mi criterio- fueron sorpresa. El asombro se hizo notar cuando Lady Gaga (primera vez nominada), consiguió su primer galardón gracias a su papel en American Horror Story: Hotel, que es el idóneo para su personalidad. Y si eso no es suficiente fascinación, el mexicano Gael García Bernal por su papel principal en Mozart in the Jungle, se llevó el Globo siendo un orgullo para la comunidad latina.

Siguiendo con la pantalla chica (aquí entrenos las series no son mi fuerte), me impresionó que Juego de Tronos no haya salido victorioso siendo tan aclamada por la crítica y sus fanáticos, sino la serie Mr. Robot –la cual totalmente desconozco- se impuso como mejor serie dramática. Sinceramente, aplaudo cuando otra serie con una historia no innovadora pero si con una contundente historia, se haga respetar ante otras que se les desbordan los premios.

¡Aja!, ahora viene lo bueno, que es El Cine. Empezando con la musicalización, supe con anticipación que la banda sonora de The Hateful Eight conseguiría el Globo, por la sencilla razón de que Tarantino en todos sus filmes, destaca la música llena de adrenalina y deleite, algo que solo él sabe hacer. Lo si di por hecho premeditadamente que ganaría See You Again, el soundtrack de Rápidos y Furiosos 7, pero mi predicción fue errónea, ya que cantó ¡Bingo! Wrinting’s On The Wall, canción oficial de 007: Spectre, perteneciente a Sam Smith, con una letra estupenda, y dejando en claro que es la perfecta para una película de espías.

Pasando un momento de la realidad a la animación, nos encontramos a Intensamente, una producción sin precedentes, original y con la esencia de lo que es verdaderamente Pixar en todo su haber. Aquí si era de esperarse su triunfo, y no por ser más que la demás, sino porque en los niños planta aquella duda si todas sus acciones están conducidas por unos pequeños seres responsables de sus sensaciones y sentimientos.

En el ámbito actoral, los papeles secundarios son tan significativos como los principales, debido a que sin ellos –no en todos los casos- la película se centraría en las acciones de un solo personaje, y no habría otra historia que complementaría al protagonista primordial en sus actos y decisiones. Por eso, el actor de reparto da el matiz que el espectador aguarda (aunque sé que muchos pensarán que no es el espíritu del filme, pero si parte de él). Contando con eso, la victoria de Kate Winslet en Steve Jobs por sobre Jane Fonda en Youth y Helen Mirrer en Trumbo, hay que decir que es trascendental. Ya ganarle a dos leyendas del cine, es porque su trabajo rompe las barreras de lo usual. Y otro éxito de la velada, del cual me sentí feliz y satisfecho, fue que Sylvester Stallone, alías “Rocky, Rambo y Cobra”, haya por fin ganado un premio de tal magnitud. Tanto fue el pasmo por la obtención del galardón, que sus colegas lo ovacionaron, reconociendo su excelente labor. Son muchas las especulaciones que harán ruido acerca de ello, pero en algún momento había que exaltar a Rocky Balboa.

Continuando con la élite de actores, por aquí se cuela la indiscutible y sensual Jennifer Lawrence, que luciendo un rojo vivaz, de nuevo cautiva a todos con su elocuencia y humor, alzando el Globo como mejor actriz de “comedia” por Joy, una película que cuenta con escenas graciosas pero no para calar dentro de este reglón. En la misma categoría pero masculino, hizo renombre Matt Damon, un actor que aunque más se le ha visto como personaje de acción, fácilmente puede interpretar otro papel, como es en The Martian, de Ridley Scott (uno de mis directores preferidos, y uno de los mejores en el género de ciencia ficción).

Y de esta manera aparece el actor que estuvo al borde la muerte, una situación que pocos son los audaces para afrontarse al poder devastador de la naturaleza. Leonardo DiCaprio, valiéndose de su destreza actoral, abordó un papel suicida, pero se armó de valor y conquistó la crítica y el Globo, posiblemente siendo su mejor actuación. Y si esa afirmación es certera, el Oscar aguardará para reposar en sus manos. (Alargaré más después del 28 de febrero).

Llegamos a lo bárbaro de la noche: filmes inéditos bajo la tutela de directores sorprendentes. Comenzando con The Martian, una genialidad de Ridley, se consagró como mejor película “comedia”, dejando una huella indeleble en la generación de películas espaciales; no por encima de su máxima obra Alien, pero si demostrando que el humano es capaz de sobrevivir donde quiere que se encuentre, y en un planeta que se pensaba inhóspito, puede ser habitable y esencial para la vida. Por otro lado, The Revenant, más que una película dramática, es una superación del ser humano y las condiciones que pasa cuando se ve acorralado por la supervivencia. Iñárritu, destacado director (Amores Perros, Babel, Birdman), volvió a crear una historia impecable, como dijo el periodista Rafael Sarmiento: “una salvajada”. Y cómo no recibir el premio a mejor director, si solo viendo en las extremas circunstancias en la que arriesgó su vida y la de su equipo de trabajo y las locaciones exageradamente frías –aparte de la estética y la buena utilización de los juegos de cámara- era impensable no concederle el Globo. Queda en claro que estas dos producciones compaginan independientemente a cuál género pertenezcan, su objetivo fue aclarar que el Hombre es rival ante cualquier adversidad.

Y esto solo fue el preámbulo para lo que se avecina en febrero. Veremos si se cumple lo mismo en los Oscars, o si ocurre lo inesperado que a veces muchos es lo que esperan. 

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